3. Factores hormonales. Los niveles de hormonas masculinas (andrógenos), como la testosterona, pueden influir en el crecimiento de las células de la próstata, y, en algunos casos, pueden contribuir al desarrollo de células cancerosas. Es probable que te receten un antibiótico para prevenir una infección de las vías urinarias. Es posible que necesites antibióticos para tratar la infección. Posibilidad de tratar pacientes que eran considerados inoperables con las técnicas antiguas. El tratamiento inicial es farmacológico cuyo objetivo es: orinar con más fuerza, no levantarse tantas veces por la noche o eliminar las frecuentes pérdidas de orina. Un láser (que pasa por este visor) libera energía que hace que el exceso de tejido que está impidiendo el flujo de orina se contraiga o directamente se elimine, haciendo de esta manera que el trastorno que sufre el paciente a la hora de orinar desaparezca completamente. La cirugía láser de próstata es mínimamente invasiva con respecto a una cirugía convencional, ya que el médico especialista inserta un visor por la punta del pene y penetra por él hasta la vejiga.
Un láser que pasa a través del visor libera energía para contraer o eliminar el exceso de tejido que impide el flujo de orina. Puede ocurrir incontinencia ya que la vejiga está acostumbrada a tener que expulsar la orina a través de una uretra que se estrechó como consecuencia del agrandamiento del tejido prostático. Estrechamiento (constricción) de la uretra. La glándula prostática está ubicada justo debajo de la vejiga y rodea la parte superior del conducto que drena orina de la vejiga (uretra). En próstatas de tamaños superiores a los 80-100 gramos, la Adenomectomía es la solución; en estos casos, es necesario “abrir” al paciente con una incisión por debajo del ombligo. Hasta hace pocos años, había sólo 2 opciones de tratamiento según el tamaño de la próstata: en próstatas con tamaños inferiores a los 60-80 gr, se realiza una Resección Transuretral de Próstata que consiste en introducir por la uretra un aparato que llega hasta el adenoma de próstata y cortarlo en pequeños fragmentos. El láser se utiliza para cortar y extraer el exceso de tejido prostático que obstruye la uretra. La cirugía con láser puede ofrecer varias ventajas en comparación con otros métodos de tratamiento para la hiperplasia prostática benigna.
Ventajas del láser en la Cirugía de la Hiperplasia Benigna de Próstata. Se utiliza un láser para derretir (vaporizar) el exceso de tejido prostático y agrandar el conducto urinario. Un láser que pasa a través del endoscopio suministra energía que reduce o que elimina el exceso de tejido de la próstata que impide el flujo de orina. Los procedimientos para tratar el agrandamiento de la próstata suelen requerir el uso de una sonda (catéter) para extraer la orina de la vejiga después de la cirugía. Ese día, haz arreglos para que te lleven a casa porque no podrás conducir después del procedimiento, y es posible que tengas un catéter en la vejiga. Cuando el tratamiento medicamentoso no tiene resultados, la única solución para eliminar ese “tapón” de próstata (adenoma) que obstruye la vejiga es la cirugía. Ideal para pacientes de alto riesgo en tratamiento anticoagulante. If you adored this post and you would certainly like to obtain more details pertaining to Cirugía de Próstata con Láser kindly check out our web site. El Láser es adecuado para la mayoría de los pacientes con próstata agrandada gracias a una técnica llamada “Enucleación de Próstata” que ha revolucionado el tratamiento quirúrgico de la Hiperplasia Benigna de Próstata. La mayoría de los pacientes pueden retomar las actividades normales, no extenuantes, en pocos días. Treinta de cada 100 varones en algún momento de su vida deberán ser operados por esta enfermedad y la mayoría de los que no se operen necesitarán ser tratados con medicamentos para orinar mejor.
El Dr. Felipe de Jesús Medina es un Urólogo en que ha ayudado a muchos pacientes a mejorar su salud, confianza y calidad de vida a través de los tratamientos más avanzados disponibles. Disfunción eréctil. El riesgo de sufrir una disfunción eréctil después de los tratamientos de la próstata es pequeño y generalmente es menor con la cirugía con láser que con la cirugía tradicional. La cirugía láser de próstata presenta una ventaja muy significativa: va produciendo una fotocoagulación simultánea de los vasos sanguíneos, disminuyendo al máximo la posibilidad de sangrado, que es siempre la gran preocupación de los urólogos en la cirugía de la próstata. Esta técnica no requiere cirugía abierta, la probabilidad de sangrado es mucho menor con una rápida recuperación postquirúrgica. En ambos casos, el paciente suele estar ingresado de 3 a 7 días y la probabilidad de sangrado puede ser significativa. La enucleación de la próstata con láser de holmio puede ser una opción para los hombres que tienen agrandamiento grave de la próstata.